¿Qué es la Transformación Digital?

El mundo está en constante evolución y tu empresa no puede quedar al margen. La tecnología está incidiendo en todos los aspectos de nuestra vida, por eso las empresas deben ser capaces de adaptarse a la transformación digital. Las nuevas competencias están orientadas a las personas y una empresa que no esté dispuesta a realizar cambios para mejorar sus procesos o la vida de sus trabajadores está abocada al fracaso. 

¿Cómo comenzar con la transformación digital en la empresa?

Para afrontar los cambios actuales y los que nos deparará el futuro es necesario desplegar una estrategia de transformación digital bien estructurada. Hoy en día no podemos plantear un cambio global sin una planificación previa, y para eso podemos usar metodologías novedosas como las ágiles. Este tipo de procesos ágiles dividen las tareas grandes en pequeñas para poder analizar un proyecto durante su desarrollo. Evitan, de esta manera, llegar al término del proceso para poder revisar el resultado. 

También es buena idea plantear la estrategia digital como una expansión del negocio. Con el lienzo de modelo Canvas y un mapa de empatía podremos definir mejor todos los problemas que podríamos encontrar: competidores, cómo se sienten nuestros clientes, cómo podemos mejorar nuestro flujo de trabajo, etc.

Por su parte, la mejora en la experiencia del cliente en todo el proceso cada vez es más patente debido a que los clientes cada día se informan mejor y comparan a fondo los servicios de una compañía y otra desde sus smartphones.

A una empresa le preocupa que la experiencia de su cliente no sea positiva o que este sea cada vez más exigente en lo que a medios digitales se refiere. Por ejemplo, si la mayoría de tus clientes hacen sus pedidos desde el teléfono, con la creación de una app podrías mejorar su experiencia de manera significativa; habrías dado un paso de gigante en tu transformación digital.​

En una era hiperconectada, en la que miles de datos se almacenan cada minuto en la nube, es necesario que como empresa no nos quedemos atrás. El internet de las cosas no para de crecer, y si bien es cierto que puede que no nos afecte en cada uno de los procesos empresariales, sí debemos tener en cuenta cuáles son las tendencias, cómo el IoT está penetrando en los hogares y cómo los clientes se volverán más exigentes a medida que se acostumbren a las nuevas tecnologías en su vida cotidiana.​​

Por eso, una estrategia de transformación digital busca sacar el mayor partido posible de las nuevas tecnologías, desde el uso del correo electrónico hasta la implementación del big data. ​

Primeros pasos para tu estrategia de transformación digital

Hay quien ve la transformación digital como uno o más proyectos en el contexto de la digitalización. Como en cada estrategia, es necesario definir un objetivo claro donde qué, cómo y por qué se conviertan en una mezcla de objetivos intermedios que con el paso del tiempo irán cobrando más relevancia. 

Define los problemas que quieras solucionar

Es quizá la parte más difícil de la transformación. Cada empresa tiene un modo de trabajar que le diferencia de la competencia; ser conscientes de nuestros puntos débiles a veces es complicado, puede que necesitemos ayuda externa para que nos veamos en un campo más amplio y podamos identificar mejor nuestros puntos de flaqueza.

Algunos problemas que habrá que solucionar pueden ser tan básicos como la comunicación. Creando un canal de Slack para la empresa pueden mejorar algunos de esos problemas, introduciendo pequeños cambios que siempre aportan mucho.

Respecto al cliente, si tiende a comprar online has de crear un ecommerce para facilitarle la compra; no olvides que el comercio electrónico no para de crecer.

Busca una solución digital para cada uno de esos problemas

Una vez que has analizado los puntos que debes mejorar en tu empresa, valora qué es lo que necesitas: puede ser un rediseño de producto o una mejora en el proceso. Recuerda que no es necesario comenzar con una gran transformación, que puedes ir poco a poco para poder medir el impacto de cada cambio y avanzar por un sentido u otro. 

Busca expertos que te ayuden en el proceso

Como sucede en todo proceso, si cuentas con expertos que te ayuden tus oportunidades de éxito se multiplicarán.

Posiblemente no tengas en plantilla expertos en los últimos programas informáticos o que sigan las últimas tendencias tecnológicas que mejor se adapten a tu sector. Pero con la contratación de expertos externos ganarás mucho tiempo, ya que ellos sabrán cómo afrontar el cambio. No tendrán ningún condicionante emocional hacia un determinado proceso, por lo que podrán sugerirte cambios que desde dentro de la empresa no se contemplaban debido a la costumbre. Paradójicamente, muchas veces se aceptan mejor las propuestas que vienen desde el exterior.

Informa de la digitalización a los trabajadores

Cuando la estrategia esté aprobada y lista para su implantación, informa de ello a los empleados lo antes posible. Estructura los datos y comparte el objetivo que se persigue con la digitalización, los cambios que vayan a hacerse y las herramientas o soluciones que sean necesarias. En muchos casos será preciso ofrecer una formación extra a los usuarios para que puedan desarrollar su trabajo con normalidad utilizando las nuevas tecnologías.

En España, cerca del 60 % de los empleados cuentan con competencias digitales básicas. Tienes que conocer a tus trabajadores para saber su grado de conocimientos digitales, así como la mejor estrategia para involucrarlos en el proceso. Los empleados usan la tecnología en su día a día, simplemente tendrás que guiarlos en los cambios que se realicen en la empresa. ​

Transformación digital y experiencia de usuario

En la mayoría de los proyectos de transformación digital, la experiencia de usuario y la experiencia de cliente ocupan un lugar central. Sin embargo, la experiencia de cliente es una amalgama donde convergen variados esfuerzos de transformación digital.

Debes recordar que la experiencia de cliente no depende de un solo departamento y, por tanto, necesita un enfoque de transformación que influya en diferentes áreas, incluyendo a los clientes. 

Y es que las nuevas tecnologías han modificado el comportamiento y las expectativas de los clientes creando un consumidor mucho mejor informado. Por eso, mejorar la experiencia de cliente es crucial en todo proceso de digitalización, así como en la fidelización de aquel.

¿Qué roles son necesarios en un proceso de transformación digital?

La tecnología emergente y puntera es crucial, pero debemos tener en cuenta qué tipo de perfiles profesionales vamos a necesitar para llevar a cabo la digitalización en nuestra empresa.

Como resulta obvio, los ingenieros de software, los expertos en computación en la nube y los jefes de proyecto siguen siendo figuras clave para las empresas que buscan implementar nuevos servicios y/o productos.

Los científicos de datos y los arquitectos de datos tienen una gran demanda en este campo, ya que la transformación de las empresas cada día se basa más en el uso de tecnologías de aprendizaje automático e inteligencia artificial.

Pero al margen de la parte técnica, la empresa también necesitará expertos en experiencia de usuario para que, a través de sus diseños, puedan definir el mejor proceso para satisfacer al cliente de una manera intuitiva. 

¿Cómo controlar los gastos en la digitalización del negocio?

Adaptarse al cambio digital puede ser muy difícil si no se cuenta con una estructura financiera sólida. Por eso, antes de aventurarte en la transformación digital debes establecer tus prioridades, así como un presupuesto.

No puede hacerse una transformación digital integral de un día para otro, ya que los costes serían muy elevados y no daría tiempo a analizar cómo los clientes van aceptando cada cambio. A largo plazo, la digitalización empresarial ahorra costes, así que es cuestión de priorizar qué cambios necesitamos en cada momento e ir implementándolos por fases.​

Por todo ello, la transformación digital puede ayudarte a conseguir mejores oportunidades para tu negocio, ya que te permitirá automatizar procesos, minimizar costes, mejorar la comunicación, expandirte más allá de nuestras fronteras y maximizar la eficiencia de cada proceso.

Muchas empresas no dan este paso por no contar con gran presupuesto, pero como ya hemos dicho anteriormente, los cambios pueden llevarse a cabo de manera paulatina y no todos ellos requieren gran inversión. Podemos comenzar con la digitalización de unos procesos, la mejora de un software de gestión o un CRM hasta que más adelante pasemos a usar el blockchain para asegurar nuestros datos o sistemas de inteligencia artificial que automaticen aún más determinados procesos.

Por supuesto, aunque la inteligencia artificial sea una tecnología en constante crecimiento, no debe ser un factor que genere temor a los trabajadores. Los empleados deben ser formados en el uso de estas nuevas tecnologías y motivados para que se impliquen en el cambio. Es fundamental que un trabajador entienda que la automatización va a reducirle las tareas más repetitivas para permitirle dedicarse a otras más creativas; la tecnología ha llegado para facilitarnos el trabajo, no para reemplazarnos. 

Finalmente, decirte que si es importante que los trabajadores estén comprometidos, el compromiso del equipo directivo lo es aún más, ya que debe abanderar la cultura del cambio y transmitir las ventajas de la transformación, así como el impacto positivo que tendrá para la marca ganar la calificación de innovadora